La muerte no detiene nuestra existencia. La tragedia de todo hombre es vivir haciendo preparativos para esta vida y no para su eternidad. La tragedia de las tragedias de todo hombre es decirle no a Cristo. Basado en el relato de “Lázaro y el rico”.
Conoce historias de personas cuyas vidas cambiaron cuando conocieron a Dios.
Testimonios del poder transformador de Jesucristo.
Escrito el 4 de febrero de 2014, por Roberto Rodriguez Aliaga